Yo tenia 5 años cuando la conoci, al principio senti temor al tenerla cerca, pues era una persona muy particular; zapatos rotos, rodillas sucias, una falda rasgada por todos lados y el cabello desordenado. La llamabamos "Blanca", talvez por su limpieza mental, porque nunca le oi decir cosas con malicia, era como una niña que se quedo en el camino y nadie le dijo que ya aparentaba 35 años. Le decian la loca pues se refugiaba en una extraña forma de decir las palabras, tenia un acento de niña, y le gustaba cantar a su paso. Era la loca para los vecinos de mi calle, pero para nosotros era "La loca Blanca".
Casi todas las tardes pasaba por mi calle. Y al asomarse sabiamos que era ella. Y todos los niños de la cuadra ibamos a su encuentro, haciamos un circulo alrededor de ella y entonabamos su cancion. Ella caminaba al ritmo de la tonada y reia con nosotros, era su fiesta, y nosotros sus invitados preferidos.
Yo creci con su locura, solia ser feliz cuando la venia llegar a mi calle, siempre rodeada de niños y de cantos alegres. Y entre momentos de lucidez soltaba historias que eran de ella, contaba sobre aquella niña que paso su vida encerrada entre cuatro paredes porque a su familia le avergonzaba alguien asi. Y con el tiempo un dia escapo de su casa para saber del mundo que habia afuera, aquel mundo en que ella nunca pudo ser aceptada , y para ocultar su temor se invento un universo para ella sola. Y fue entonces que la llamaron "loca".
No se que tan malo sea la locura, yo casi siempre la veia feliz, solo lloraba cuando contaba esas tristes historias de aquella niña prisionera de su familia. Pero nosotros la consolobamos y hasta le traiamos algun pañuelo de nuestros padres para secar sus lagrimas. Entonces empezo a ser uno de nosotros, y aquel universo que invento para que habite su soledad llego a ser parte de nuestro universo. Entonces Blanquita ya no estaba sola.
Pero pasaron los meses, no recuerdo exactamente cuando, aquella dulce loquita no volvio a pasar mas por mi calle, los niños de mi calle comenzamos a extrañarla y empezamos a preguntar por ella en las otras calles donde solia pasar, es curioso pero no eramos los unicos niños que la seguiamos y cantabamos con ella. Aquel universo que ella creo alguna vez dejo de ser tan pequeño como creian los adultos.
Pero nunca mas supimos de ella, mucho tiempo despues supimos el rumor que su familia se la habia llevado a otro lugar para encerrarla para siempre en un "lugar para locos". Como siempre hace nuestra sociedad con los extraños o los diferentes: los margina, los ignora o en el peor de los casos los oculta y los encierra. Talvez "Blanquita" ya esta muerta, o nos dejo un dia de la semana que nadie recuerda, quizas se rehuso a vivir el mundo que los demas le eligieron y lo apartaron de su universo propio, talvez murio mucho antes sin que ninguno de los habitantes de su planeta se enterara. Triste final para alguien que invento mundos diferentes, que inventaba felicidad en los niños y canciones nuevas con su curioso lenguaje infantil.
Yo no se que tan loco estoy, si nesecito un tratamiento especial o si debo estar encerrado en algun lugar, Solo se que mi lucura empezo cuando tenia cinco años y conoci a aquella muchacha que casi nadie pudo comprender porque actuaba de esa manera tan extraña. Entonces siempre quise crear nuevos mundos y escribir historias sobre esos mundos. Y talvez algun dia poder encontrarla en alguna de las historias que escribo y poder preguntarle como se dio cuenta que este mundo no servia que opto por inventar uno mejor.
Mi dulce blanquita, la amiga de mi infancia, la maestra de mi imaginacion, seguro que ahora haces reir a los angeles o lanzas cantos alegres caminando sobre las nubes del cielo. Te recuerdo cada vez que invento una historia o cada vez que me llaman "loco", es que no vivimos en un mundo perfecto. Y los demas no saben que podemos crear mundos mejores.