Nos conocemos desde hace tanto tiempo y jamás compartimos un café o un paseo por la Plaza Mayor, nunca fuimos juntos al cine a ver una película romántica ni tampoco caminamos bajo la lluvia una noche de otoño. Sin embargo estuve contigo cuando quisiste que estuviese, intente robarte una sonrisa cuando pensaste que no tenias nada que ofrecerme, también me hice a un lado cuando así lo deseaste. Fabricaste una vida con tus propias manos y fuiste feliz a tu manera, cuando volvimos a encontrarnos éramos un par de locos que jugaban a vivir, yo aprendí a escribir algunos poemas y tu aun tenias esa sonrisa tan parecida a un ángel.
Seamos cibernovios, como todo el mundo suele hacerlo. Ser cibernovios no solo es decirte palabras calientes y vernos desnudos a través de una pantalla, no es escribir de las tantas maneras en que podemos amarnos sin tocarnos uno al otro, tampoco es prohibirte salir un sábado por noche o que andes por la calle con ese escote que detesto. Hay muchas cosas mas por explorar desde esta ventana, te dejaría mensajes cariñosos en tu bandeja cada mañana, inventaría poemas que lleven tu nombre, dibujaría aves disfrazadas de colores volando en el firmamento para demostrarte que tengo imaginación y celebraría cada fin de mes aquel día en que te conocí, todo lo que sea necesario para poder sentir esa extraña sensación que llaman amor.
Somos tan imperfectos mujer, estamos llenos de dudas y lamentos pero cuando soñamos lo hacemos juntos. Siempre amare tu sonrisa por sobre todas las cosas, lamentare tus ausencias, celebrare tus festejos y no existirá nadie en el mundo que tenga tantas ganas de abrazarte como yo. Quisiera que seamos cibernovios pero si no llegamos a serlo; seamos buenos amigos, de esos que comparten las alegrías y los llantos, de esos que siempre tienen cinco minutos para extrañarse y buscarse entre el tumulto de palabras que llueven en el ordenador. Talvez algún día no muy lejano podamos darnos ese abrazo que tanto anhelamos, pero mientras tanto sigamos siendo esa mitad que nos hace falta, sigamos siendo ese par de locos que juegan a vivir.
Seamos cibernovios, como todo el mundo suele hacerlo. Ser cibernovios no solo es decirte palabras calientes y vernos desnudos a través de una pantalla, no es escribir de las tantas maneras en que podemos amarnos sin tocarnos uno al otro, tampoco es prohibirte salir un sábado por noche o que andes por la calle con ese escote que detesto. Hay muchas cosas mas por explorar desde esta ventana, te dejaría mensajes cariñosos en tu bandeja cada mañana, inventaría poemas que lleven tu nombre, dibujaría aves disfrazadas de colores volando en el firmamento para demostrarte que tengo imaginación y celebraría cada fin de mes aquel día en que te conocí, todo lo que sea necesario para poder sentir esa extraña sensación que llaman amor.
Somos tan imperfectos mujer, estamos llenos de dudas y lamentos pero cuando soñamos lo hacemos juntos. Siempre amare tu sonrisa por sobre todas las cosas, lamentare tus ausencias, celebrare tus festejos y no existirá nadie en el mundo que tenga tantas ganas de abrazarte como yo. Quisiera que seamos cibernovios pero si no llegamos a serlo; seamos buenos amigos, de esos que comparten las alegrías y los llantos, de esos que siempre tienen cinco minutos para extrañarse y buscarse entre el tumulto de palabras que llueven en el ordenador. Talvez algún día no muy lejano podamos darnos ese abrazo que tanto anhelamos, pero mientras tanto sigamos siendo esa mitad que nos hace falta, sigamos siendo ese par de locos que juegan a vivir.
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