viernes, 16 de octubre de 2009

ELLA Y EL


Ella sueña con que el amor lo puede todo, piensa que serán felices desde el primer abrazo, desde la primera palabra.

El es muy incrédulo al amor, suele decir que nada es para siempre y que el amor es solo un invento de los humanos para sobrevivir.

Ella envuelve su corazón entre pétalos de rosas, imagina una vida junto a él, piensa que solo basta una sonrisa y todo lo demás llegara como la brisa en la primavera.

El esta acostumbrado a estar solo, pero hay días en que anhela que el asiento de a lado se ocupe aunque sea por unos segundos y sentir que hay alguien mas en este mundo.

Ella ha empeñado su alma para cumplir su sueño, compro un boleto de avión y viajara miles de kilómetros solo para ofrecer su corazón medio partido.

El aun se torna incrédulo a las circunstancias, piensa que solo al verlo ella dará media vuelta y se marchara por donde vino, porque no se siente merecedor de las cosas bellas que a veces ofrece la vida.

Ella teme que él no la llegue a amar de la misma forma, pero si con su corazón bastase para vivir, con gusto lo daría en sacrificio para poder tener una nueva oportunidad.

El no cree mucho en el amor, aunque cada seis noches escriba cosas amorosas de amantes furtivos, lo poco que sabe del amor esta encerrado bajo siete llaves y con puerta falsa. Su soledad es el gran guardián de sus miedos.

Ella toma el avión y las maletas llena de suspiros, deseos intensos y susurros indiscretos, esperando llegar a Lima para encontrarse con aquel chico incrédulo y lleno de temores. Pero aun así esta segura de que él la amara como ella se merece.

El la espera en los pasadizos del aeropuerto limeño, con un papel escrito con su nombre y al reverso un poema copiado de Neruda que nunca le leerá, porque se siente cursi al hacerlo en publico.

Se da el encuentro, un fuerte abrazo inicia su historia, ambos se sienten bien juntos, pero ella suelta todo el corazón, él aun siente miedo
de ser quien solía ser. Caminan por las calles de Lima, la plaza mayor les da la bienvenida, la luna saluda sus cuerpos fogosos, sus ganas de vivir, sus miedos de sentir.

Ella le pide que le hable de poesía, que le diga cosas sensible al oído, como cuando llegaron a conocerse, cuando el jugaba a ser poeta y ella un pedazo de ángel.

El no sabe que decirle, solo sabe escribir pero no hablar de lo que escribe, es un vil farsante de las palabras, un hombre lleno de frases pero vacío de sensaciones.

Ella le da la espalda y deja caer una lagrima, por primera vez siente miedo de que no funcionara.

El se da cuenta de que ella se quiere dar por vencida, su cuerpo empieza a temblar de miedo, su soledad ya no se siente tan familiar. El por primera vez tiene miedo a estar solo y se pone a llorar en silencio.

La luz
apagada solo hace la escena mas critica, ambos saben que están llorando, pero por razones distintas. Se tocan las manos, luego los brazos y se funden en un solo ser mientras la luna los acompaña. Y en el silencio de la noche... buscan una nueva oportunidad.

5 comentarios:

Lovely dijo...

Vaya, muy buena historia, y... es real? vamos no sé, suena también, aunque algo incomodo xD pero...no todo tiene que ser facil,y el amor es asi, algo torpe, dificily a la vez ameno ^^ muy buena historia, un beso y como siempre, sonrie y se feliz, hasta siempre ^^
PD: me encanta ser la primera en comentar xDDDD

kalima dijo...

que bonita histaria de amor...aunque tal vez acabara en desamor.
pero la vida es asi, el amor es asi...y aun asi merece la pena vivirlo

magnifico tu escrito, me ha emocionado
un beso

Unknown dijo...

Lovely: pues si, es muy real. Se que las cosas del amor nunca seran faciles, pero se hace el intento.
un beso

Kalima: Esperemos que no acabe en desamor, pero creo que aun falta mucho pan por rebanar. Y tienes razon, la vida se hizo para vivirla bien.
un abrazo

Teperepe dijo...

Lucha por ese amor.


Un abrazo

Almiux dijo...

todo lo que pasa en las noche, teniendo unicamente como testigo la luna es fantastico.....solo esos momentos se quedan grabados en el corazon de las parejas
un besito y gran abrazo rene