viernes, 31 de julio de 2009

DESPEDIDA

Miro la luna que se oculta del frió, las nubes forman murallas para esconder los eclipses, las estrellas huyen despavoridas al saber que la noche esta por terminar, el ruido de los gatos suenan como eternas sinfonías. No es que sea un día especial, no quiero marcar esta fecha en el calendario, lo que yo solo estoy buscando, es que ya no sea mas triste esta despedida.

EVENTUALIDADES

El reloj me dijo que ella no me lo perdonaría, la noche se convirtió en una antesala al delirio, el día de mañana se veía venir como las gotas que esperan llenar un océano y el presente se ponía pálido, cenizo, desconsolado.
Y yo tomándola en mis brazos, oliendo su perfume que tanto extrañe, disfrace mis gestos de hombre mundano, de loco profano, de tonto sin corazón, le quite el vestido, la llene de caricias, fingiendo el amor. Luego sin dejar que despertara, sin cerrar las ventanas, sin dejar huellas de nada, la mire fijamente…y le dije adiós.

martes, 28 de julio de 2009

HACE CINCO MINUTOS


Hace cinco minutos la tuve entre mis brazos, jurando promesas que pensaba cumplir, ofreciendo mis manos, mi piel y mis besos, envueltos entre fuegos que derivan de mis ganas de vivir, las sabanas gastadas son testigos, junto a ese pequeño velador, donde dejamos un cigarrillo, dos copas de vino, tres preservativos y su ropa interior.

Hace cinco minutos le dije que la amaba, como suelen decir los amantes en sus clímax de pasión, le regale mi anillo de fantasía, mi número telefónico y un verso trillado, que se dicen dos cuerpos desnudos que buscan el amor. Me miró despacio como queriendo llorar, suspiro muy hondo sobre la almohada caliente, apretó mi mano entre sus dedos fríos y al guardar silencio fui yo el que lloró.

Hace cinco minutos estaba dentro de ella, gimiendo palabras que nunca entendió, deje mi alma a sus pies como ofrenda, pero al salir de la cama mirando al vació, guardo su misericordia y frente a mi lo pisó. Le dije que se quedara para siempre, que yo seré el amante que siempre deseó, ella soltó una sonrisa diciendo: “no soy el vicio de nadie”, se vistió muy rápido y al cruzar esa puerta… me rompió el corazón.

TE ESTOY BUSCANDO


Estoy buscando mis alas para volar hacia ti, mujer que no tengo, y poderte decir lo que le hace el amor al tiempo, lo que le hace la espera al olvido, lo que le hace la pasión al delirio. Los días pasan como tienen que pasar, con mañanas grises y noches iluminadas, con sus medias lunas y sus cuartos menguantes.

Estoy buscando mis labios para aprender a besar, jugar con mi lengua, o decir tu nombre mientras nuestras bocas se destruyen en buena lid. Quiero darte un abrazo de cumpleaños, un beso de buenos días, una caricia de buenas noches. Si tú me lo permites, me gustaría contarte historias al oído, que hablen de princesas y dragones, de caballeros y doncellas, de quijotes y sancho panzas, solo si tú me lo permites.


Estoy buscando un puerto donde seguir navegando, un mar infinito donde pueda ser el mismo naufrago que siempre he querido ser. Ser poeta y tú mi musa de cada viernes por la noche, ser un vagabundo siniestro y tú mi calle más transitada, ser grito en el silencio y tú mi eco más melodioso y mejorado. Te estoy buscando mujer que no tengo… te estoy buscando.

miércoles, 22 de julio de 2009

ELLA Y EL (tercero)


El viaja quince horas solamente para poder verla, darle un abrazo y decirle “te quiero”.
Ella espera, siempre espera, porque la vida esta pendiente de su eternidad.
El lleva dos cuadernos en blanco, tres lápices, un ipod y una cámara digital.
Ella no lleva nada, piensa que las cosas te terminan atando a la rutina y al miedo.
El no la ha visto hace catorce años, desde que era un niño, anhela saber como esta.
Ella convive con el olvido, el pasado se desvanece como el sol de la mañana.
El aun recuerda su sonrisa, sus manos gastadas, su cabello blanco.
Ella piensa que la soledad es parte de su naturaleza, es su manera de envejecer en paz.
El baja del bus y recorre a pie las distancias que lo separan de su antigua casa donde pasó su niñez.
Ella se sienta en su puerta, viendo como desfilan los bueyes y las mulas, para ir a trabajar.
El llega a su casa, la encuentra sentada, le da un abrazo y le dice: “te quiero tanto abuela”
Ella lo abraza muy dulcemente, le sonríe, acaricia su cabello, y le pregunta: “quien eres tu?...”

EL (segundo)

El esta sentado frente al mar, lanzando piedras desde la orilla, sus manos tiemblan de frió, pero nada le impide disfrutar de la brisa y el sonido de las olas. Tiene un abrigo que le costado muy barato pero que lo mantiene caliente, su cabello se ondea mientras las olas golpean las rocas del muelle. Son las cuatro de la tarde, él aun permanece ahí sentado, queriendo atrapar musas que divagan entre la espuma del mar y piensa que a veces es tan sencillo ser feliz.

La noche se asoma tan despacio que se puede presentir, empieza a llover
sobre el cielo de Lima, es hora de partir. Pero él aun permanece sentado, esperando que salga la luna, para luego coger un papel en blanco, una pluma gastada, acomodarse el cabello, para empezar a escribir sobre los momentos exactos en que uno siente que es tocado por dios.

ELLA (primero)

Ella se viste de colores luminosos, nunca le hizo caso a la moda, pensaba que con solo protegerse del frió bastaba, esperaba la tarde con ansias porque disfrutaba como el cielo sufría su bella metamorfosis, como tomaba tonalidades deslumbrantes que impactaban sus ojos, decía que esa era la mayor prueba de que todo puede cambiar en este mundo.

Entre sus trapos viejos, su escondite calido, donde guarda su pequeña humanidad cuando cae la lluvia, ella dice ser feliz. Sonríe cuando “Puchy”, su perrito pequeño le muerde la falta para ganarse u
n bocado, sonríe cuando ve llegar el sol por su ventana, sonríe cuando llega a casa luego de sembrar sus semillas en el campo. La oscuridad no es impedimento para su felicidad, mientras se abriga del frió, enciende el fuego con la leña que ha cortado con sus propias manos, observa como las cenizas salen volando luminosamente por el cielo azulado, siente que es ella la que esta adornando de estrellas el firmamento, y bajo ese cielo...sigue sonriendo.

viernes, 17 de julio de 2009

EL VAGABUNDO

Los vientos me alejan de ti, el eco de tus gritos se van perdiendo como si nunca hubiesen ocurrido, las calles se ponen oscuras, el susurro de los grillos se vuelven melodías frenéticas ante las agujas del reloj. Ya es medianoche y el silencio se va apoderando del mundo, solo queda un viejo vagabundo en aquella banca del parque, escribiendo incoherencias en el aire, aferrándose a su abrigo raído y sucio, pues el frió es mas violento.

Las luces de los autos se van despidiendo de las calles, el silencio reina por sobre todas las cosas y los grillos ya se qued
aron dormidos. Son las tres de la mañana, aquel vagabundo sigue sentado en la misma banca del parque, ya dejó de escribir en el aire, ahora se aferra a sus recuerdos para seguir sobreviviendo al frió. Aquel vagabundo bien podría ser yo, que va naufragando en un futuro incierto, donde el amor es solo un susurro parecido al grito de los grillos.

PARA VIVIR

Naces del norte en forma de fragilidad, al final de tu mirada guardas diversos sentimientos forrados en papeles de colores, como si fueses un regalo de cumpleaños listo para dar la sorpresa, sobre tus pechos tienes ese bello calor maternal que emanan los ángeles, entre tus dedos escondes vocales y consonantes que al ser unidas rítmicamente dejan leer un “yo soy la vida”.

Estas llenas de coincidencias, de anécdotas similares, azares de ficción, talvez tu naciste primero o quizás primero existí yo, pero los caminos son cíclicos, tienen flujos y reflujos de acuerdo lo dicta tus ganas de amar. Lo que diga el destino, los signos zodiacales o el rumbo de las estrellas me tiene sin cuidado, yo siempre viaje a mi ritmo, con más curiosidad que miedo, con menos razón que locura. Y si una noche de cualquier mes, de cualquier año me invaden las dudas, lanzo una moneda… y hago todo lo contrario.

jueves, 9 de julio de 2009

CUANDO NO ESTAS TU

Cuando tú no estas regresan los fantasmas del pasado, pero cosa curiosa, ahora llegan para hablarme de ti, lo poco que saben es lo que yo les he contado. Saben de tus extrañas manías por preguntar lo que no debes, por predecir lo que nunca pasara, por tratar de explicar las cosas ilógicas del azar. Saben que te quiero como quiero las canciones de Oceransky, que muchas veces intento escribir sobre tus bondades, pero siempre caigo en la redundancia de embellecer lo maravilloso de tu ser.

Cuando tú no estas extraño lugares donde nunca estuve, porque tu me hablaste de ellos, extraño ceremonias que nunca sucedieron, extraño paseos que nunca dimos, extraño las charlas que están por venir. Cuando tu no estas la vida se hace compleja, como un crucigrama de los domingos, como un artificio matemático, como una receta de comida francesa. Espero tu llegada para no sentirme deprimido, como un desamparado a las orillas del mar, que suelta sus deseos de tenerte y abrazarte tan fuerte que el tiempo jugaría a las escondidas.

No me hagas m
ucho caso, esto es solo una tira de incongruencias que a veces suelto un chico desalumbrado, alguien que no tiene mejor idea de pasar el tiempo, haciendo una lista de sensaciones que van llegando… cuando no estas tú.

SI ALGUN DIA

Si un día empiezo a volverme loco, si empiezo a creer que el alma muere cuando callan los suspiros, si mis manos dejan de inventar historias sin final feliz. Cuando la tarde caiga sin trompetas de ángeles, cuando el mar solo sea un pedazo de aguas indomables, cuando los silencios ya no digan mas nada.

No te asustes si un día me pongo extraño y hablo en lenguajes todavía no inventados, si empiezo a olvidar lugares, nombres o paseos interminables. Si un día se me caen las caretas, se me descifran las men
tiras o se me terminan los pretextos, no hagas lo que los demás harían. Solo tómame muy fuerte de la mano, mirame a los ojos aunque solo pueda oirte, dime que me sigues queriendo y por favor… no me dejes caer.

martes, 7 de julio de 2009

ASIENTO VACIO


El concierto esta por empezar, el teatro esta casi lleno, la gente de los últimos asientos pifia muy fuerte para que ya empiece la función, los aplausos de las primeras filas no se hacen esperar, son casi las diez de la noche y el escenario esta listo, solo una silla que se ve muy cómoda, una pequeña mesa sobre la cual descansa una botella de vino y una copa, es lo que basta para una velada inolvidable. El artista esta por salir, el público se entusiasma porque al fin llegara el momento esperado.

Sin embargo yo aun me siento perdido, me veo extraño como si ese no fuese mi lugar, como si le robe la vida a alguien. A mi lado hay un asiento vació que emite nostalgia, que me recuerda lo solo que estoy en noches como esta, donde el amor se hace presente en forma de melodías desencadenadas por un trovador. Me gustaría extrañar un pasado distinto, pero nunca lo hubo, siempre fui el bicho raro que se colaba a los conciertos sin acompañante.

El concierto esta empezando, la luna se derrite con la lluvia allá afuera, las estrellas van tomando sus asientos para detenerse a escuchar, las luces se apagan y el silencio del público invade el teatro. Pero aquel asiento vació permaneció intacto toda la noche, los pliegues de su franela quedaron tal como lo dejaron, todos se
preguntaban sobre la persona que se perdió el concierto, algo malo le habrá sucedido murmuraban. Mientras tanto yo me paraba para salir del teatro, con las manos dentro de mi abrigo, mirando a mi alrededor emocionado y mis dedos jugueteando con dos boletos dentro de mi bolsillo, deseando que algún día pueda llegar la persona que llene aquel asiento de a lado.

SI YO FUESE DIOS


Si yo fuese dios, me tomaría tres días para crear el universo y cuatro para diseñar tu belleza, encontraría mis descansos en soñarte y moldearte a mi imagen y semejanza, le preguntaría a otros dioses algunas recomendaciones para lograr hacerte perfecta, invulnerable y voluble. Si yo fuese dios no escatimaría esfuerzos ni tiempo, si todo me pertenece, manejaría los hilos de la imaginación y lo previsible para terminar mi obra maestra que llegarías a ser tú.

Si yo fuese dios, extendería tus niveles hasta donde ningún mortal pueda llegar, donde nadie pueda alcanzarte en el mundo real, si tan solo aprendiendo
a soñar se pueden acercarte un poco. Si yo fuese dios, haría lo posible por ser un animal nocturno y andar detrás de tus caminos cada noche de mi vida, intentando atraparte en fantasías o realidades, aunque mis intentos sean en vano. Pero me tomaría esa licencia solamente porque te quiero y porque a veces sueño con ser un simple mortal que quiere aprender a amar.

miércoles, 1 de julio de 2009

MUJER DE DOS CORAZONES

Ella vaga por las calles de Buenos Aires, buscando pasiones desenfrenadas, liberando la mujer que siempre quiso ser, la que no le teme al dolor ni a las cosas cotidianas de dos amantes entre sabanas, ella extiende sus tentáculos intentando alcanzar presas fáciles del fuego que lleva dentro, queriendo vengarse de su genero opuesto, del que muchas veces se sacio de su sangre para seguir viviendo.

Ella encuentra cada fin de semana un cuerpo caliente donde pasar sus noches, una mente abierta que la pueda comprender por unas horas y solo mediante caricias y sometimientos, hacer del amor una tortura extrañamente placentera. Soñando quizás que algún día alguien llegue para rescatarla de su castillo lleno de dragones.

Ella llega a su casa cada noche después de las once, mientras el amor de su vida esta dormida, ese pequeño pedazo de ángel de apenas quince meses de nacida, que llego un día solo para provocarle sonrisas. Ella la ama quizás como nunca ha amado en su vida, piensa que el universo nace cuando ella abre los ojos, aunque cree que el mundo no será mejor mañana, desea siempre estar a su lado, porque siente que no existe la felicidad en un mundo sin amor. Ella daría la vida entera si fuese necesario, con tal de amanecer a su lado cada día, uno de sus corazones siempre será para ella.

El frio es terrible en Buenos Aires, la gente se confunde entre el caos de las gra
ndes avenidas, pero ella se distingue entre toda la multitud, ella es especial ante mis ojos, la quiero como solo se quiere a una musa. Esta tan lejos pero siempre es un gusto encontrarla y sentir que yo encajo entre sus dos corazones, porque aquella mujer lleva dos corazones en el pecho, es por eso que ama de esa forma tan intensa y opuesta. Es madre, es mujer… es mi musa de la noche.

TARDASTE TANTO


Tardaste mucho en llegar, pensé que te habías olvidado de mi, que estabas distraída viendo las olas del mar o vociferando memorias al viento, pero ya estas aquí, sirviéndome un café bajo la oscuridad de la noche, pues siempre llegas de noche, las mañanas no son compatibles a tus rarezas, a tus diversas maneras de expresarte, será por eso que somos grandes amigos.

Es medianoche y el cielo predice tu llegada, las nubes se esconden detrás de la luna, las estrellas van formando caminos hacia la nostalgia, mi ventana sigue abierta de par en par y llamándote por tu nombre. Tardaste mucho en regresar pero ya estas aquí… bienvenida soledad.