domingo, 28 de agosto de 2011

VIAJERO 9

Los taxistas siempre tienen algo que contar, muchas veces fabulosas, otras fantasiosas, y solo en alguna ocasión dicen la verdad. Siempre me gusta hablar con ellos, me fascina su manera de contar las cosas sin decir nombres ni días exactos, exagerando un poco mas la próxima vez.

Tome un taxi a medianoche por la calle de Montevideo, hablamos de muchas cosas, y en un lapsus de sentimentalismo, le conté mi historia.

Supongo que ahora, por las calles de Trujillo, alguien anda por ahí diciendo que se enamoró tres veces, que se acuesta con cualquiera por despecho o por rabia, para sentirse un buen amante, aunque no tuviera la menor idea de lo que es amar en serio. Alguien anda contando por ahí que es un escritor frustrado, que cada fin de semana escribe en una pagina de Internet, que se anda cogiendo a medio mundo, exagerando por enésima vez, como es la costumbre de todo taxista.

1 comentario:

Teperepe dijo...

Jejejeje...a mi también me encanta intercambiar palabras con los taxistas. Es algo tan ilustrador!!

Mañana viajo, seguro que me topo con alguno y le cuento que te conozco.

Besossss
Tere