Me detengo a leer los diarios en la esquina de mi calle, me entero de la alza de precios, los asaltos en las carreteras y la violencia de las pandillas, compro el periodico que tiene las noticias mas terribles y voy inmediatamente a la ultima pagina para ponerme a resolver el crucigrama. Hoy es viernes, una parte del feriado largo, y no tengo a donde ir. No tengo planes de viajes ni de aventuras peligrosas, solo unas ganas enormes de dormir sin que nadie me moleste, apagar las luces y poner un disco de Sabina para relajarme, pero el calor insoportable deja todo en un dulce intento.
Resuelto el crucigrama me pongo a hacer barquitos de papel con las otras hojas del diario y me propongo a competir con mi sobrino a ver quien las hace mas rapido. Nunca fui habil con las manos, el escore fue 5 a 3 a favor del pequeño de seis años. Entonces no tuve mejor distraccion que leer unos escritos de Garcia Marquez que tenia en mi velador, cada vez que leo al maestro entiendo mejor el arte de no hacer nada. Solo dejar que el mundo siga su curso y estar atento a lo que sucede y de vez en cuando coger un papel y dibujar historias de lo acontecido.
El sol esta por ocultarse, la noche esta por venir. La noche, mi demonio mas temido ahora. Cada vez que oscurece y las luces se encienden a lo largo de la avenida siento que las cosas estan incompletas, que mi voz se quiebra, mis labios se secan y mi mirada se pierde entre el tumulto de gente que pasa a mi alrededor. No es ninguna enfermedad ni un ataque de nervios, es solo la consecuencia de tu auscencia... mis formas de extrañarte.
1 comentario:
hola, me encanto tu manera de escribir y de extranar..
saludos cordiales,
tatiana
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